La alimentación en el embarazo

-Es primordial cubrir también tus necesidades nutricionales.
-Garantizar que el bebé obtenga un peso adecuado, saciando las demandas del feto.
-Impedir la infección listeriosis o la enfermedad toxoplasmosis, provocadas por parásitos en los alimentos.
-Reducir el riesgo de sufrir diabetes gestacional, alteraciones lipídicas, hipertensión, obesidad, reflujo y otras enfermedades que pueden llegar a repercutir en el desarrollo del parto y en la salud de tu hijo.
-Prevenir déficits nutricionales: vitamina B12, hierro, yodo o ácido fólico.
-Evitar el parto prematuro o cesárea, preparando el organismo de la madre para el parto.
-Impedir la aparición de problemas en la formación neuronal del embrión, así como alteraciones de crecimiento, malformaciones, etc.
-Facilitar la producción de leche de la futura mamá.
-Mantener una buena alimentación te ofrece más posibilidades de un nuevo embarazo.
-Y, no menos importante, dar ejemplo de una rutina alimentaria saludable a los hijos.